así de furiosa estoy |
Tres respiraciones profundas y sigo adelante, sin prisa pero sin pausa.
a la que cada día me encuentro, en las tiendas, por la calle, en el parque... siempre los mismos, tan cercanos y tan desconocidos.
Hoy dedico mi blog a la gente del barrio:
barrio sésamo |
Desde que tenemos a la Chispa que hablamos con más gente, gente variopinta que también va con su mascota, acabas saludando a muchos más que antes. Esto es positivo, porque te das cuenta de cuánto necesitas a los que te rodean. Si un día falta alguien a la cita diaria, pueden ocurrir dos cosas:
Opción 1.-no le das importancia, pero si la falta se repite, empiezas a preguntarte qué pasará, y si ya hace días que no aparece, te atreves a insinuarlo a otros paseantes: -¿y fulanito que hace días que no le veo?, y menganito desde la otra punta te responde: -se han ido unos días a la torre.
Opción 2.-no le das importancia, ni lo echas de menos, lo ves pero no lo miras, lo observas de pasada y por casualidad, el efecto de su ausencia no causa apenas ningún efecto en ti, ni tan siquiera una minúscula modificación.
Sin embargo, son estas pequeñeces, a las que no les damos importancia, ni mucha ni poca, las que nos hacen, sobre todo en las grandes ciudades, ser más humanos, iba a decir, pero rectifico, últimamente este concepto está sobrevalorado y me disgusta, me decepciona, así que, lo cambio y digo que, esos instantes, nos hacen más generosos y sensibles.
Por unos segundos, al mirar y saludar, al cambiar unas palabras con el panadero chino, la hindú del colmado, el dependiente argentino, al comprarle el periódico al Manel o el pollo a la Guadalupe, dejamos de pensar en nosotros mismos, para compartir.
que no llego a tiempo si no hay muerto no hay entierro |
Por suerte no hemos llegado "todavía" al extremo americano, viven sólo y exclusivamente para trabajar y competir, por desgracia si seguimos imitándolos como hasta ahora, no tardaremos en aventajarlos.
¡Qué lástima!
No hay comentarios:
Publicar un comentario