jueves, 18 de julio de 2013

El caso del "período canicular"



Temporada del año en que el calor es más fuerte, tanto en el hemisferio sur como en el norte, desfasados seis meses entre sí. Dura de cuatro a siete semanas, dependiendo del lugar.
La Abrasadora
¡Ahora entiendo a las yayas (cariñosamente hablando) que van a clase conmigo!
Sueltan a finales de junio: 
-"Se está de maravilla, por mí ya se podía quedar así todo el verano"
Y yo pensaba, en pasado lo digo: -"entonces ya ni me pongo los vestidos ni nada".
Con las ganas que tenía, también en pretérito, de llevar chanclas y tirantes...y mírame ahora que no puedo con mi alma, arrastrándome de tienda en tienda, pillando un poco de aire acondicionado, para poder llegar a casa y enchufar el nuestro, muy a pesar del coste económico que supondrá, en futuro próximo...

energía alternativa bien aprovechada
¿Dónde estará Revilla ahora? Lo último que supe es que viajaba por España con el fin de saber qué piensa y siente la gente ante tanta injusticia habida y por haber. Donde quiera que se halle este buen hombre espero que se cubra bien con un gran sombrero y eche unas largas siestas, que esto va para largo.
listas para el cine
El primer domingo de rebajas fuimos a acompañar a unos amigos a la estación, su "ave" salía a las 15,45h., nos despedimos con tristeza y decidimos que lo mejor sería irnos a tomar el café al centro comercial. Estaba casi vacío.
Hacía un calor bestial, como en agosto del 2010 en Roma, y seguramente las playas estarían repletas de toallas y sombrillas y el agua de gente en remojo.
Aprovechamos para mirar libros en el FNAC, teníamos disponibles a todos los dependientes que pringaban ese día, pues de pobrecillos nada, que estaban super-fresquitos y nosotros también.
Primer síntoma de la pre-menopausia: -¡Con lo bien que se está aquí ya son ganas de ir a achicharrarse a la playa!

Me siento "cerilla"
Llevo días que me noto mal, rara, con "síntomas", parece que viene pero no viene. Y la canícula agrava la situación tan embarazosa en que me encuentro, es sofocante y me apremia resolverla.
Estoy que echo chispas, como mi perrita no, peor.

lunes, 8 de julio de 2013

El caso de "la falsa delgada"

Audrey Hepburn
La conozco "al dedillo" y me la sé de "pe a pa", hace más de veinte años me la presentaron y me cautivó, soy adicta y fanática, unas veces más que otras, según las circunstancias y el tiempo. No se separa de mí ni un solo día desde entonces, es la más fiel que he poseído nunca pero la odio.
Y hace unos días en la tele descubrí como definirla, lo dijeron de pasada, pero se clavó en mi mente y lo retuve. Tanto tiempo intentando abreviar en palabras "qué es" y por fin lo tengo: "falsa delgada". Suena mal.
Lo que más le fastidia, cuando sacan pastelitos en las fiestas o el plato lleno a rebosar en el restaurant, es que le digan: -Tú no te has de preocupar, con lo delgada que estás.
Precisamente está así porque se preocupa constantemente.
Como la gente no dejará de "hablar por hablar" lo mejor será hacer oídos sordos.

A medida que envejeces te das cuenta que tienes dos manos
una para ayudarte a ti mismo y la otra para ayudar a los demás
Cuando está a punto de dar el paso definitivo se da cuenta que se le va juntar todo, los daños colaterales de su ansiada decisión con los síntomas del climaterio, y la dificultad se intensifica, se multiplica por diez.
Es curioso y estúpido este mundo en el que países enteros se mueren de hambre mientras en otros se tira la comida. La enfermedad nos hace iguales a todos. Nos sobran las excusas que nos justifican ni alivian del dolor.